miércoles, 18 de mayo de 2011

Un poema por el amor de una maestra sanjosefina

"Y la poesía es, arquitectura de palabras verdaderas"
Alexis Alfil


La poesía es una forma de sentirse bien con nuestro espíritu, es una forma también de "atar nuestros demonios" para poder comportarse según los canones normales de la vida; pero también es cierto que los mejores y consagrados poetas iniciaron su desarrollo creativo cantándole al amor, a ese sentimiento que permite evocar gratos recuerdos de querencia por la amada, por la musa que inspira y motiva a las más grandes travesías, con el único propósito de intimar con la mujer que se quiere, que se desea, que se sueña. Y en ese transitar por la vida, por nuestros años de adolescencia, de juventud, es que nos sentimos impulsados a escribir poemas a esa dama que muchas veces sólo la vemos en el colegio, en la esquina, en el barrio, en la universidad y que se constituye una musa inspiradora para la creación de los más amenos e inimaginables poemas que llenan nuestro espíritu de vida y de pasión encendida.

Y llegamos a constatar con la lectura del poema que les regalamos en esta edición, la historia de muchas parejas, las cuales han pasado muchas peripecias en su relación y pese a ello han salido estoicas y unidas para siempre, sólo por estar armadas con el sublime sentimiento del amor.


JUNTOS POR AMOR

Hoy, he querido en el tiempo viajar
hacia aquellos lejanos días
en que juntos la aventura de la vida
decidimos recorrer.
Unidos ante toda tempestad
nunca pudo el infortunio triunfar.
En mis recuerdos llevo grabadas las risas
después de cada batalla ganada
cual rama del árbol frondoso de la vida.
Nuestras primaveras dieron sus frutos,
fuimos luz en su anochecer
iluminamos su sendero, con ejemplo de amor.
Mi vida...tu vida, nuestras vidas,
tu la fuerza y la esperanza
yo, el alma, la constancia.
No fue fácil, pero juntos,
aguerridos siempre frente al mundo
y aquí estamos...
guardando en nuestros corazones los recuerdos
cual cofre guarda el más hermoso de los tesoros
de tu amor y de mi amor.
En la vida fuimos:
tu mi consuelo, yo tu aliento.
Juntos hasta el final de la aventura.
Nos aguardan aún sueños que alcanzar,
gratos momentos que disfrutar.
Y así, juntos, aguardaremos el día
en que tomados de la mano sintamos
en un suspiro, nuestro corazón expirar.

Por Lilia Ruíz Vásquez (Profesora del
Colegio Nacional de "San José)

3 comentarios:

Julissa Johana Salazar Ramirez dijo...

muchas felicidades...Los maestro son un tesoro...

Alexis Alfil dijo...

Es una alegría que una colega exprese mediante la poesia, ese gran torrente espiritual que tiene dentro de su ser. Saludos, desde la Tierra de Sicán.
Alexis Alfil

saldaña teran dijo...

Realmente este autor resalta el amor eterno que existe en pocas de las parejas que unen su vida este el epilogo de esta . Exalta la belleza del verdadero amor , y como dicen enamorate con el cerebro y no con el corazon ........saldaña teran 5 P